Anteriormente ya hemos hablado de los fantasmas digitales y planteábamos la incógnita de si existía alguien que no generara datos. En esta ocasión, te vamos a explicar cuál es el valor de la huella digital, es decir, cada uno de esos datos que vamos dejando por Internet.
El valor de la huella digital
El valor de la huella digital es cada vez más importante, tanto en el mundo laboral como en el personal.
Hay que entender que el Big Data plantea una oportunidad para tu vida digital, por lo que vale la pena conocer qué medidas inteligentes puedes tomar para lograr que el Big Data trabaje en tu beneficio y, al mismo tiempo, puedas proteger tu identidad.
Es importante separar la huella digital personal de la profesional, porque existen muchos accidentes en ese aspecto a la hora de, por ejemplo, abrir una presentación para compartir, en donde sale publicidad poco deseada. Este tipo de accidentes solo ocurren porque hemos utilizado mal la manera de comunicarnos con los ordenadores.
Para remediar este asunto, nuestra recomendación es que estés registrado en distintas cuentas cuando trabajas y cuando navegas en tu tiempo libre. Con esto, logras que el ordenador confunda los perfiles y tome estas dos cuentas como propiedad de personas distintas, por tanto en una te mostrará una cosa completamente distinta de lo que te va a mostrar en la otra.
Evitar buscar cosas que no estén relacionadas con tu perfil, ya sea el personal o el profesional, porque esto hace que tengas una huella digital limpia, principalmente en el campo laboral. De esta forma, aprovecharás el valor de la huella digital para tu beneficio profesional.
¿Cómo usar los datos a nuestro favor?
Los datos pueden usarse para nuestro beneficio. Imagina, por ejemplo, las recomendaciones que te hace Instagram, que resultan bastante acertadas, ya que los algoritmos que trabajaron en ello fueron modelados con precisión para entregarnos publicidad que nos beneficia. Lo mismo sucede con las sugerencias de otras plataformas, como Netflix, que puede recomendarte películas que no crees que te gustarán y, aun así, acaban siendo de tu agrado.
El modo más conocido que usan las páginas para recolectar información son las cookies, pequeñas unidades textuales que dejas cada que navegas por una página. Puedes leer la siguiente documentación oficial para saber cómo utiliza Google las cookies.
Y aunque no todo es dicha y existen muchas intrusiones poco éticas, como el phishing o el simple uso de nuestros datos para manchar nuestra imagen, debemos tratar al máximo de aprovechar todos aquellos datos que producimos a diario para que sea lo más beneficioso posible.
¿Quieres aprender más?
Si quieres aprender más sobre el valor de la huella digital y cómo cuidar tus datos, recuerda que está disponible nuestro Big Data, Inteligencia Artificial & Machine Learning Full Stack Bootcamp, una formación intensiva con la que podrás especializarte en este sector y convertirte en un profesional en pocos meses. ¡No dudes en revisar el temario y apúntate!
