Si siempre has querido saber cómo ser nómada digital y cuáles son los retos de este estilo de vida, este artículo definitivamente es para tí. Con la consolidación del trabajo en remoto y la proliferación de herramientas digitales, son cada vez más numerosos los profesionales que eligen trabajar por su propia cuenta y aprovechar para viajar alrededor del mundo.
Dentro del sector tecnológico, este modo de vida es aún más frecuente, al ser uno de los primeros en adoptar la modalidad de teletrabajo entre sus empleados. Por ello, un gran porcentaje de la comunidad de nómadas digitales en el mundo está vinculado al mundo de las TIC (Tecnologías de la Información y Comunicación).
Muchas son las ventajas de optar por este estilo de vida. Sin embargo, también hay dificultades que hay que sobrellevar, y no hay mejores personas para hablar de ello que Francisco José Navarro García y Dandan Chang Wang, ambos nómadas digitales y desarrolladores detrás de AtalayaSoft. Son nuestros invitados gentileza de Malt, la mayor comunidad de consultores freelance de Europa, para este webinar dónde que nos cuentan su experiencia personal y nos ofrecen las claves definitivas de cómo ser nómada digital.
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¿Qué es y por qué ser nómada digital?
Primero, definamos lo que significa ser nómada digital. Esta expresión designa a cualquier persona que aprovecha las posibilidades de desempeñar su trabajo a distancia, gracias a las nuevas tecnologías, para vivir viajando, esto es, llevar un estado de vida “nómada”. Por lo tanto, si lo que buscas como profesional es trabajar en proyectos que te gustan, poder viajar frecuentemente y alcanzar libertad financiera, nómada digital es lo tuyo. A diferencia de trabajar por cuenta ajena como asalariado, este estilo de vida te ofrece más flexibilidad y la posibilidad de obtener ingresos mejores a largo plazo. El mayor inconveniente que paraliza a todo aquel que se propone dar el paso es la inseguridad. No obstante, en el contexto económico y laboral actual, un empleado de empresa con puesto fijo tampoco tiene la seguridad de antaño. Nuestros ponentes confiesan que una de las razones que les ha empujado a apostar por ello es la ambición. Cuando trabajas para ti mismo, tienes más posibilidades de crecer como profesional, sin estar limitado por las barreras que te impone una empresa. Si además lo haces viajando continuamente, el enriquecimiento es brutal.Claves de cómo ser nómada digital
Eso sí, elegir este tipo de experiencia no es pan comido. Por ello, hay que considerar varias circunstancias. Por ejemplo, no es lo mismo una persona con un pasaporte que te permite viajar fácilmente alrededor del mundo, sin necesidad de visado, que lo contrario. Si eres un privilegiado en ese sentido y tu nacionalidad te posibilita moverte entre países sin grandes complicaciones, aún tienes que tener en cuenta otros aspectos como la legalidad y/o fiscalidad de la realización de tu actividad en tu ciudad de elección. Por ello, nuestros invitados recomiendan ir donde mejor te traten y aplicar la “teorías de las banderas”, es decir, plantar banderas en varios lugares para diversificar el patrimonio y ganar en opciones. Por último, para ser nómada digital hay que cambiar el chip como persona. Emprender de por sí ya es una aventura. Al hacerlo, además, viajando por el mundo, los retos se multiplican. Hay que adaptarse a las diferentes culturas, normas y costumbres, sin prejuicios, y habituarse al cambio constante. Si te atreves a dar el paso y consigues dominar estos aspectos, sky is the limit (el cielo es el límite).
