Factores de entregabilidad en el email marketing

Cuando hablamos de email marketing, lo primero que muchas personas se suelen imaginar es spam y correos en masa que suelen ser molestos para los usuarios. No obstante, hay filtros y etiquetas que los servicios usan como factores de entregabilidad para los correos. Conocer estos factores y aprender a crear contenido que sea bueno a ojos de los servicios de email es la parte más importante de una campaña de email marketing. En este post, te contamos algunos de estos factores de entregabilidad, para que siempre los tengas en cuenta. 

Factores de entregabilidad: reputación del remitente

La puntuación del remitente es la puntuación que los proveedores de correo asignan a la entidad que envía un email. Esta puntuación depende de diferentes factores como:

Cantidad de emails

La cantidad de emails que se envían por una organización son uno de los factores de entregabilidad más importantes, lo ideal es que sea una cantidad pareja todo el tiempo, sin altos y bajos que puedan causar alarma. 

Envíos marcados como spam

Para los proveedores de correo, el input o feedback de los usuarios es muy importante, cada servicio usualmente cuenta con herramientas con las que pueden reportar los contenidos de un correo. Si los usuarios marcan tus envíos como correo no deseado, será una mala indicación de tu reputación ante los ojos del proveedor y te podrán seguir marcando como spam. 

Frecuencia de envíos que caen en spam traps

Las spam traps son una de las formas que tienen los proveedores de correo electrónico de verificar si un remitente es de fiar o no. Estas consisten en plantar correos electrónicos que no han dado acceso a tu compañía para enviar correos. Son direcciones sin uso que no se suscriben a nada. Si llega uno de tus emails a una de ellas, significa que estás enviando a direcciones que no te han otorgado premiso, lo cual te reporta como spam. Además, estarás violando de la ley de protección de datos. 

Blacklist

La blacklist es una lista de correos electrónicos que han sido reportados como no confiables. Si el remitente de un correo electrónico se encuentra dentro de una blacklist, será bloqueado inmediatamente.

Estas blacklist son listados de IPs, servidores y dominios que han llevado a cabo envíos de correos no deseados, spam, phishing y prácticas similares. 

Tasa de rebote

Una elevada tasa de rebote generalmente significa que envías a direcciones para las que no has probado su veracidad, es decir, tu lista de correos no está limpia. Esto no solo es uno de los factores de entregabilidad que pueden afectarte, también es una mala práctica para tu campaña. Mantener una lista limpia asegura que puedas llegar a los usuarios que realmente les interesas, y que no estás mandando correos simplemente por llegar a muchas personas, consumiendo recursos sin ver ganancias. 

Comportamiento del usuario

Los ISP almacenan información acerca del comportamiento de los usuarios con el fin de escoger y mostrar únicamente el contenido que los usuarios estén interesados en ver. Por esto, aunque un usuario no marque un correo o remitente como spam, si nunca abren los correos de una persona en específico o los borra sin abrirlos, el gestor lo interpretará como una falta de interés y dejará de notificar o mostrar estos correos al usuario. 

IP del remitente

Finalmente, dentro de los factores de entregabilidad podemos encontrar la dirección IP. Si la IP desde la que se hacen los envíos tiene una falla en alguno de los factores que mencionamos anteriormente, afectará tu entregabilidad.

Por esto, es importante hacer una búsqueda de las plataformas desde las cuales haremos los envíos de nuestro contenido, para asegurarnos de que no habrá ningún problema. 

Otra forma de solucionar este punto sería por medio de una IP dedicada, la cual sería exclusivamente para tu contenido. En esta técnica tendrías que trabajar para que tu IP sea de confianza para los correos, para no tener inconvenientes por ser una IP nueva. 

Aprende más sobre el tema

Hay varios factores que pueden impactar en tu campaña y, dependiendo de cada proveedor, estos van cambiando. Al final todos son un conjunto por el cual te evaluarán y decidirán donde se ponen tus correos y, por esto, debes conocerlos y mejorar tus prácticas para poder llegar a tus usuarios. 

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