¿Qué es un proxy inverso?

Un proxy inverso es un recurso que se ubica por delante de los servidores web con el objetivo de reenviar las solicitudes realizadas por el usuario a esos mismos servidores, a través de elementos como, por ejemplo, un navegador. Esto quiere decir que se sitúa dentro de dos entidades y lleva a cabo un servicio específico, en este caso, el envío de una solicitud al servidor web.

Estas acciones del proxy inverso contribuyen a crear un nuevo nivel de abstracción y control que ayuda a aumentar el rendimiento, seguridad y fiabilidad del sistema, al tiempo que se encarga de garantizar un flujo fluido del tráfico de la red entre un servidor y un usuario.

Características de un proxy inverso

Un proxy inverso se caracteriza por situarse en medio del enlace entre los servidores y los usuarios, lo que permite que estos últimos realicen las solicitudes web yendo al proxy de forma directa, en lugar de pasar primero por el servidor. Después, esa solicitud se reenvía hacia el servidor determinado.

Además de esto, un proxy inverso tiene la capacidad de dirigir las solicitudes del cliente a una amplia gama de parámetros y opciones, como, por ejemplo, las condiciones de la red, el estado de la aplicación donde se ejecute, la ubicación y dispositivo del cliente, entre otras propiedades.

De manera que un proxy inverso se utiliza normalmente con el objetivo de ofrecer un equilibrio de carga para las aplicaciones web, así como las Interfaces de Programación de Aplicaciones. Además de esto, pueden aprovecharse en labores como la descarga de los servicios de las app, ayudando así a mejorar su rendimiento a través de estrategias como la compresión inteligente (es decir, la eliminación de los patrones redundantes pertenecientes a un determinado flujo de datos), así como el almacenamiento en caché.

Se debe añadir también que un proxy de tipo inverso puede implementarse como un servicio de reenvío de solicitudes el cliente o bien participar de manera activa en este intercambio de señales entre servidores web y usuarios.

Otra característica importante de este elemento es que suele utilizarse por parte de múltiples sitios web con el objetivo de mejorar los niveles de velocidad relacionado con el cargue de las páginas, debido a que, con un proxy inverso, la solicitud del usuario pasa directamente a ejecutarse, lo que disminuye los tiempos de procesamiento de su solicitud.

Ventajas de un proxy inverso

Dentro de las ventajas principales de la implementación de un proxy inverso se encuentran elementos como los siguientes:

Balanceo de carga

Este proceso también se conoce dentro del sector IT por su denominación anglosajona load balancing y se refiere a la distribución uniforme del tráfico entrante entre los diversos servidores que tenga un sitio web determinado. Esto previene que solo uno de sus servidores se sobrecargue por la cantidad de visitantes. De manera que, en las ocasiones donde un servidor presente algún tipo de fallo, otro de estos servidores se encarga de intervenir para administrar adecuadamente el tráfico asignado a ese recurso.

El proxy inverso se encargará, por tanto, de asegurar que cada uno de los servidores del sitio web maneje un número igual de solicitudes de usuario.

Encriptado SSL

Otra de las ventajas de la implementación de un proxy inverso es su cifrado de tipo SSL, que consiste en la desencriptación de las solicitudes de los clientes que entren al sistema, al tiempo que cifra las respuestas que salgan. Estas labores contribuyen a la liberación de recursos propios del servidor de origen, permitiendo así una mejora en su funcionamiento.

Protección frente a ataques

Cuando se implementa un proxy inverso, el usuario también beneficia su seguridad, debido a que no necesita revelar la dirección IP de sus servidores. La no identificación de los IP dificulta que un atacante pueda atentar contra estos servicios, ya que solo podrán ser redirigidos al proxy inverso, que tiene unos parámetros de seguridad más robustos y mejores recursos para prevenir estos tipos de ataques

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