Eugenio Barquín, bilbaíno de 38 años, ha conseguido una de sus grandes metas en la vida: reciclarse y volver al mercado laboral trabajando de desarrollador iOS.
Desempleado y sin expectativas de encontrar trabajo de lo suyo (Administración y Dirección de Empresas), decidió buscar una alternativa laboral. En esa búsqueda encontró a KeepCoding, y gracias a su esfuerzo, a día de hoy trabaja como programador.
¿Quieres saber cómo lo consiguió? Volvamos un poco atrás en el tiempo.
Eugenio desde siempre había tenido gran interés por el mundo de la tecnología, sus amigos y compañeros siempre le preguntaban todas sus dudas tecnológicas. Fruto de esa atracción decidió estudiar algunos cursos de programación en Visual Basic, pero finalmente tuvo que dejarlo de lado ya que su carrera universitaria, y después su posterior inserción al mundo laboral, no le dejaban tiempo para seguir instruyéndose en programación.
Pero ya sabemos que la vida da muchas vueltas y años después, Eugenio, encontrándose en situación de desempleo, se fue a Londres a buscar suerte y allí se reencontró con el mundo de la programación. Un día cualquiera, «por azar del destino» descubrió que Apple acababa de lanzar un nuevo lenguaje de programación llamado Swift y se dispuso a investigar sobre él.
Indagando por la red se topó con KeepCoding y, en palabras de él «después de realizar uno de vuestros cursos de Swift me quedé tan prendado por la metodología de las clases que quise continuar estudiando con vosotros».
Lo que en principio iba a ser un curso de Swift, se convirtió en un año sabático dedicado íntegramente a entrar por la puerta grande en el desarrollo mobile. ¿Por qué la puerta grande? Porque decidió matricularse a la edición IV del Bootamp Mobile. Tomar una decisión así no es fácil, tienes que confiar en que vas a invertir tu tiempo y dinero en algo que va a merecer la pena, y tener un compromiso contigo mismo.
Eugenio reconoce que «fue muy duro» pero admite que mereció totalmente la pena. «Los formadores son de lo mejorcito y se dedican profesionalmente a las áreas de formación que imparten, con lo que están al día de lo que ocurre en el sector». Otro de los factores que señala que le hizo tomar esa decisión tiene que ver con los temarios:
Ahora forma parte de un equipo de 5 personas que se ocupa de la creación de un producto de banca online. «Es un proyecto enorme y complejo pero que estoy seguro que me va a reportar grandes satisfacciones y experiencia».
El objetivo principal de Eugenio al matricularse en el Bootcamp Mobile era el de reciclar su profesión para así volver al mercado laboral. Y lo ha conseguido.
Lo que en principio iba a ser un curso de Swift, se convirtió en un año sabático dedicado íntegramente a entrar por la puerta grande en el desarrollo mobile. ¿Por qué la puerta grande? Porque decidió matricularse a la edición IV del Bootamp Mobile. Tomar una decisión así no es fácil, tienes que confiar en que vas a invertir tu tiempo y dinero en algo que va a merecer la pena, y tener un compromiso contigo mismo.
Eugenio reconoce que «fue muy duro» pero admite que mereció totalmente la pena. «Los formadores son de lo mejorcito y se dedican profesionalmente a las áreas de formación que imparten, con lo que están al día de lo que ocurre en el sector». Otro de los factores que señala que le hizo tomar esa decisión tiene que ver con los temarios:
«Cada año se adapta a lo que demanda el sector. De hecho lo que yo estudié en la IV edición del Bootcamp se ha adaptado a las necesidades del sector en las siguientes ediciones. Esto te garantiza obtener la mejor formación posible».Otra «ventaja» por las que decidió inscribirse en este Bootcamp, es porque las clases son a distancia y en directo, pudiendo interactuar con los profesores para resolver dudas y compañeros para intercambiar ideas y, a la vez, compaginar las clases con otras actividades. Eugenio recomienda encarecidamente este Bootcamp, para él fue un proceso de inmersión total en el que adquirió todas las competencias necesarias para convertirte en un crack del desarrollo mobile.
«Es una gran recompensa mirar hacia atrás y ver que si antes competía con cientos de candidatos en las ofertas de trabajo ahora, en el mejor de los casos, compito con menos de una decena, lo que incrementa las probabilidades de conseguir un puesto».Siempre aparecen incrédulos cuando se enuncia una afirmación como esta pero «es fácilmente constatable viendo cualquier portal de empleo o Linkedin», reitera el entrevistado. De hecho, el mismo Eugenio es una prueba de ello, gracias a su esfuerzo y tenacidad ha conseguido un trabajo como desarrollador iOS en Innocv., empresa de desarrollo de aplicaciones informáticas. «Fue terminar el Bootcamp y empezar a realizar entrevistas y pruebas técnicas». La marca KeepCoding es sinónimo de programadores de calidad, por eso no es de extrañar que en cuanto tu perfil incorpora uno de nuestros Bootcamps, tu perfil aumente en visibilidad e interés. Además, en KeepCoding se realiza un seguimiento a los alumnos y se les ayuda y orienta en el camino para que puedan encontrar ese empleo que desean desde el momento en el que comienzan su formación.
Ahora forma parte de un equipo de 5 personas que se ocupa de la creación de un producto de banca online. «Es un proyecto enorme y complejo pero que estoy seguro que me va a reportar grandes satisfacciones y experiencia».
El objetivo principal de Eugenio al matricularse en el Bootcamp Mobile era el de reciclar su profesión para así volver al mercado laboral. Y lo ha conseguido.
«Si algo me ha enseñado este Bootcamp es que los límites son los que tú te quieras poner, y que el esfuerzo, siempre tiene su recompensa».Quizás en el futuro le gustaría volver a probar a trabajar en el extranjero donde le consta que se paga más en el ámbito del desarrollo, aunque por supuesto, tiene los pies en el suelo, y sabe que debe aprovechar al máximo la oportunidad que le ha brindado Innocv. Antes de terminar la entrevista, le pedimos que nos diera algunos consejos tanto para aquellos a los que les interesa la programación pero no han dado el paso, como para aquellos que, aunque saben programar, no profundizan en sus conocimientos o simplemente lo ejercen como hobby.
